Mientras que los medios nos llevan una guerra lejana e inexplicable de lo habitual, y los medios e Internet nos muestran dantescas imágenes, todo parece indicar el conflicto en la lejana Ucrania continuará, por ahora, sin novedades.

Mientras el gobierno genera sus propias crisis, para-supuestamente-solucionarlas- el narcotráfico no se detiene y sigue penetrando todas nuestras estructuras y nuestra precaria institucionalidad. En esta ocasión, reproducimos un interesante artículo del Eco. Jorge Chávez Álvarez, presidente de MAXIMIZE y expresidente del Banco Central de Reserva acerca de un problema que se sigue agravando, mientras que los Barranzuela, Guillén y Chávarry rotan por el ministerio del Interior. Un sector que no da la talla.

Durante la última campaña electoral, una de las propuestas electorales que despertó más polémica y temor-no solo en círculos empresariales, sino académicos, profesionales y sociales- fue la referida a la elección de una Asamblea Constituyente, y la elaboración de una nueva constitución. Para el constitucionalista Domingo García Belaúnde, esta posibilidad se hace cada vez más lejana.

Los conflictos mineros, justo cuando los minerales están a precios record y más requerimos dee esta actividad, han vuelto a reactivarse. Sea en Las Bambas, (Huancavelica), Aquia (Ancash), estos problemas pusieron de manifiesto una vez más no solo su complejidad, sino la incapacidad del Estado peruano para encausarlos y promover una minería realmente responsable.

La periodista Katy Cano, ha sido testigo de varios de estos conflictos, principalmente el de Aquia (Ancash), donde opera Antamina, quizá una de las empresas-hasta hace poco- consideradas modélicas en su forma de trabajo.

El gobierno presentó su largamente anunciada propuesta de reforma tributaria, la cual, como ocurre siempre, despertó polémica, primero por la pertinencia, y luego, sobre todo por las preocupantes consecuencias que podría tener en los ciudadanos.

Para Iván López Rocha, exgerente de Fiscalización de Lima en la SUNAT, licenciado en Administración por la Universidad del Pacífico, y Magister en Gestión Pública por la Universidad Continental, la iniciativa tiene una falla de origen: haberla presentado sin tener el voto de confianza a la presidenta del Consejo de ministros, Mirtha Vásquez.

En el año 2000, se firmó un contrato decisivo de inversión privada en el Perú, fruto de incansables negociaciones y que significó un cambio notable en el país. Un recurso cuya exploración y explotación nos había sido esquivos desde los años 80, por la situación de crisis e inseguridad que nos agobiaba en aquel entonces.

En las últimas campañas presidenciales, varios candidatos y líderes de opinión y especialistas demandaban una revisión y posible renegociación del contrato, y el gobierno de Perú Libre no podía ser la excepción. Un desafortunado mensaje en Twitter del presidente del Consejo de ministros, Guido Bellido, llamó a la empresa a renegociar, bajo amenaza de nacionalización. 

Mientras que dólar sigue el alza, y la crisis se agudiza para grandes sectores, el gobierno errático de Pedro Castillo continúa con su inercia y mensajes tibios y en ocasiones contradictorios, de promoción de inversion pública y privada, y al mismo tiempo, reiteradas y difusas iniciativas sobre un cambio de constitución.

Para Alfredo Ferrero Diez-Canseco, exministro de Comercio Exterior, y Turismo el gran problema se encuentra en el propio palacio, donde aparentemente, ni el propio presidente sabe que rumbo tomar, en medio de un entorno variopinto y sin unidad de criterio.