Orlando Chirinos: "Uno de los aspectos que nos hace vulnerables a fenómenos como "El Niño" es no considerarlo recurrente"
Cuando no salimos de las protestas violentas, el Ciclón Yaku, y un cada vez probable Fenómeno del Niño golpea duramente al país y pone en evidencia la reiterada y monumental incapacidad del estado peruano para hacer frente a estos hechos. El Ing° Orlando Chirinos, experto en la materia, afirma que esta es la oportunidad para realizar no solo una reconstrucción real y sin corrupción en el país, sino emprender las acciones de prevención para mitigar los efectos de estos desastres naturales.
Chirinos Trujillo, egresado de la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM), con Posgrado en Ciencias, con mención en Ingeniería Hidráulica en la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), con experiencia en Ejecución y Supervisión de Infraestructura Hidráulica en el ámbito rural, Gestión y Manejo de Cuencas Hidrográficas; y en Gestión Pública como Director General de la Dirección General de Infraestructura Hidráulica (2010-2013) del Ministerio de Agricultura, considera que el trabajo del Estado debe considerar, forzozamente, un enfoque de planificación territorial.
Ddlc: ¿Cuál es el balance de los efectos del paso del huracán Yaku en la infraestructura agraria, y en otros sectores?
O.CH: Desafortunadamente, negativo. Los hechos nos encuentran una vez más, desprevenidos, desnudando nuestra poca capacidad resiliente al no haber tomado nota de lo que se debió hacer para que no se repitan los impactos negativos originados por el más reciente evento extremo del año 2017, el denominado Fenómeno "El Niño" Costero, por mencionar el más cercano, el cual ya no debería estar considerado como Fenómeno, sino como lo que es un evento extremo recurrente, consecuencia directa del Cambio Climático.
Esta situación nos obliga a planificar y tomar acciones efectivas de manera oportuna, estableciendo prioridades para las inversiones públicas y generar los cambios para que los procesos donde se planteen programas y proyectos sean efectivos, lo cual constituye una tarea pendiente en el corto plazo.
Ddlc: ¿Tiene usted algunas cifras sobre el daño causado por esta emergencia?
O.CH: Aún no contamos con cifras definitivas, pues estamos inmersos en el periodo de lluvias extraordinarias, con sus consecuencias ya conocidas. Sin embargo, el FEN del 2017, según reportes del MEF, habría significado un aproximado de S/. 20 mil millones en pérdidas, por lo que nos urge trabajar e intervenir, pero considerando un enfoque territorial. No podemos seguir generando proyectos y programas desarticulados de los demás componentes de las unidades hidrográficas.
Incurriríamos en un error al realizar intervenciones solo donde ocurren los eventos extremos como desbordes e inundaciones. Se debe intervenir en las partes altas de estas zonas, donde precisamente se producen las precipitaciones, y también en la parte urbana con sistemas eficientes de drenaje pluvial.
Además, se debe planificar no solo para gestión de riesgo sino en busca de una mirada de desarrollo, que considere incluso, en casos particulares, propuestas de reubicación de poblaciones, lo cual suena complicado, pero si no se enfocan las propuestas con desarrollo económico para las personas, se seguirán repitiendo los mismos factores de ubicaciones en zonas donde precisamente no se debe poblar.
Ddlc: ¿Cuál es la afectación sobre el agro, del cual viven millones de personas?
O.CH: El problema ocurre porque los espacios donde se desarrolla la agricultura forman parte del espacio de flujo del río, inclusive la ocupación de la denominada faja marginal, que quizás no se tenga en cuenta que no pueden ocuparse precisamente por el riesgo que conlleva, pero lamentablemente se hace caso omiso a las disposiciones legales, y son las áreas de mayor afectación,pues es el territorio del río donde el flujo ocupa ese espacio.
Queda claro que si se cumpliera al pie de la letra lo dispuesto por ley los impactos no serían los que ya conocemos, esa es una tarea de las autoridades-reitero- considerar en el planteamiento de soluciones el enfoque de territorio enmarcados en propuestas de desarrollo.
Ddlc: ¿Las medidas anunciadas por el gobierno servirán para paliar la situación?
O.CH: En plena afectación nos queda únicamente reaccionar a los acontecimientos que se presentan, pero lo que no debemos postergar es trabajar en el que, como y cuando de lo que se debe aplicar, bajo una planificación, considerando las características del territorio como unidad hidrográfica y en el marco de propuestas de desarrollo. Las iniciativas deben tomaer en cueta este factor, trabajar con ríos requiere de la experiencia y conocimiento de los técnicos.
Creo que no se está viendo el problema desde sus distintas aristas. Quizás el solo hecho de pensar que es un tema de gestión únicamente, nos traerá como consecuencia trabajar no en los factores que agudizan estas situaciones, seguir quizás considerando que se trata de destrabar proyectos como si se tratase de solo procedimientos, cuando lo que hace falta es asegurar la calidad tanto de los diagnósticos como de las propuestas, y eso es netamente técnico.
Ddlc: Se acaba de anunciar la creación de una Autoridad de Infraestructura. ¿Cree que marcará una diferencia cualitativa con la ARCC? Recordemos que existe un organismo similar en Transportes, la ATU, por sus resultados no ha dado fuego.
O.CH: Como había mencionado, las intervenciones deben enfocarse en las condiciones específicas de cada territorio, no podemos estandarizar proyectos. Cada propuesta deberá responde a los retos de cada espacio a intervenir. En algunos territorios la geografía permitirá quizás el desarrollo de estructuras para almacenar agua mientras que en otros no, por ello la importancia del enfoque territorial, si realizamos las mismas acciones no esperemos resultados distintos.
Ddlc: ¿Los peruanos tenemos muy malos recuerdos de los estragos del Niño? ¿Nos hemos recuperado de los ocurridos en el 98, 2017, en qué medida?
O.CH: Uno de los aspectos que nos hace vulnerables a fenómenos como "El Niño" es no considerarlo recurrente. Hay que asumir que somos un país que debe convivir con esta y otras situaciones, en particular con estos episodios de lluvias extremas, lo que debemos estar pendiente es que pasadas las lluvias tengamos claro que, como y tomar medidas.
Que se concrete aquello de las lecciones aprendidas y que no se repita nuevamente que nos encontremos desprevenidos, no olvidemos que, así como somos golpeados por exceso de lluvia, también lo somos ante la falta de ella, por lo cual hay que trabajar también en la prevención ante sequias.
Ddlc: ¿Cómo evalúa el trabajo que se realizó, como, por ejemplo, la descolmatación de ríos? ¿Por qué no se hizo, especialmente en las ciudades como Piura, y Tumbes?
O.CH: Cada periodo de lluvias trae consigo el transporte de sedimentos desde las partes altas de las cuencas hasta las partes media y baja, que por efecto de la pérdida de su cobertura vegetal en las partes altas agudizan la pérdida de suelo que finalmente va a ser depositado en el lecho del río, el trabajo de descolmatación es una actividad permanente, por lo que como medida de prevención es correcta, pero tan solo es una condición que permite que el caudal fluya sin desbordarse.
Sin embargo, ante un fenómeno extraordinario no debe considerarse la única acción. Resulta importante aplicar medidas de mediano y largo plazo como la reforestación de las partes altas, tanto para proteger al suelo de sus pérdidas como para permitir la infiltración de las lluvias, precisamente para evitar que se generen caudales extremos que generen desbordes e inundaciones. Esta conclusión debería incluirse como resultado de un análisis y enfoque territorial.
Evitemos en lo posible seguir trabajando bajo un enfoque de reducción de brechas de servicios, pues no permite ver otros factores que forman parte de ente tan dinámico como el río.
Ddlc: ¿Cuáles son las medidas de rehabilitación que se requieren con urgencia en el sector agrario, especialmente en Piura, La Libertad, Tumbes, parte de la selva, y algunas zonas de Lima?
O.CH: Como medida principal para el control de pérdidas de suelo en riberas a causa del incremento del caudal del río y su velocidad las de protección, hay que realizar las conocidas como defensas ribereñas, pero con el complemento de intervenciones en toda la unidad hidrográfica, sobre todo donde ocurren las precipitaciones, conocida también como cuenca húmeda, a través de acciones más de naturaleza verde que las de infraestructura gris. Todo esto con la finalidad de mejorar las condiciones para que las precipitaciones puedan infiltrarse, evitando la generación de flujos extremos con la consecuente inundación de las partes media y baja, además, en donde sea posible, aplicar medidas para el almacenamiento del agua, que evidentemente contribuirá a la disminución de los caudales extremos.
Esa es la propuesta técnica que corresponde para adecuarse a la naturaleza, aparte de otros aspectos, como establacer las actividades que se puedn desarrollar dentro del territorio de la unidad hidrográfica con un enfoque de desarrollo.
Ddlc: ¿Antes de iniciar la fase de la Reconstrucción y de obras de mitigación, debería plantearse una política de planificación territorial?
O.CH: Definitivamente, para planificar las intervenciones en la unidad hidrográfica se debe optar por no seguir planteando proyectos y programas bajo el enfoque de servicios, ello genera desarticulación de las intervenciones, que deben funcionar como un sistema.
El enfoque territorial debe constituirse en el sustento técnico de las propuestas, sino vamos a seguir generando proyectos sin vinculaciones con las necesidades particulares del espacio a intervenir.
Ddlc: ¿Está preparado Agrobanco para apoyar al MINAGRI en el financiamiento de los productores agrarios afectados por el Fenómeno del Niño Costero, o el global que se anuncia?
O.CH: Siempre resulta complicado el tema de disponibilidad de recursos para la producción agraria. Considero que debe explorarse otros instrumentos adicionales al seguro catastrófico para este fin, pero siempre deben considerarse medidas preventivas, sabiendo que estos eventos se suceden cada vez con mayor frecuencia.