¿Libre mercado, capitalismo sin control o insensibilidad del sistema financiero?
Me considero un economista liberal, por tanto creo en el sistema del libre mercado, pero también creo que el Estado tiene que intervenir como manda la Constitución cuando sea necesario ya que el libre mercado en ciertas actividades muestra aristas propias de la ley de la Selva.
El Perú es uno de los países latinoamericanos con más bajo indicador de penetración bancaria, es decir las microempresas, pequeñas empresas y el ciudadano común no utilizan el sistema bancario como un instrumento de financiamiento u ahorro.
Esta situación a mi modo de ver se explica por algunas razones de peso: el desconocimiento, el grado de penetración de la economía moderna en las zonas rurales y pequeñas ciudades especialmente, y el temor que se tiene al Sistema Financiero por los costos y sobre costos administrativos y financieros .
Con respecto a este último tema, considero que a muchos de ellos no les falta razón, porque sencillamente parte del sistema financiero muestra una insensibilidad a prueba de rentabilidad y pese a que es legal, no deja de ser abusivo y contradictorio con la subliminal propaganda que se realiza para captar clientes.
Si no veamos uno solo de los muchos casos que conozco:
El 04 de Octubre del 2008, el Congreso de la República promulgó la Ley de Reestructuración de la Deuda Agraria. Ha trascurrido más de un año y no se cumple con aplicar esta ley, al igual de lo que sucede con muchas otras, que incluso deben ser aplicadas en primer lugar, por el propio gobierno.
Producto de este incumplimiento se están sucediendo múltiples ejecuciones de garantías que plantean ganancias – como dice Guillermo Giacosa- desmesuradas y éticamente injustificables y contrarias a toda lógica que no sea la del capitalismo sin control: Un humilde productor agrario logra un crédito de $ 15,000.00, no puede cancelar la deuda por efectos del Fenómeno del Niño y el Banco se adjudica su terreno en tercera convocatoria por $ 21,000 dólares (podría hacerlo en primera convocatoria por un monto mayor y luego reclamar un saldo deudor menor). En la página web de este Banco se ha puesto en venta el mismo terreno en más de $85,000 dólares. Y hay más, ha notificado al agricultor – el día que falleció – la exigencia del saldo deudor por un monto mayor a $ 47,800 dólares, es decir una rentabilidad acumulada de 647%.
Y encontramos frases publicitarias de “ayudándote a crecer”, “lo hacemos posible” “tu banco amigo”, etc. En los mismos términos de Giacosa, muchos de los que reciben sumas excepcionales son los mismos que contribuyeron con sus ingeniosos y explosivos paquetes financieros a materializar la crisis que actualmente vivimos.
Hasta en los países donde reina el liberalismo el Estado interviene, no discreta si no abiertamente para hacer cumplir su rol y la leyes también. Habría que imitar no solo la concepción del sistema económico, sino también la acción del estado de cara a la protección del ciudadano de a pie.
* Economista