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New Order, The Cure, y Robert Smith, el bufón del wave-pop

El 5 de abril toca en estos lares New Order, extraordinaria banda oscura de Manchester, new wave y post punk. Agrupación que se originó de las cenizas de otro referente wave ochentero, Joy Division, en medio de una crisis económico-social que azotó Inglaterra, y en el que aparecieron otros grupos que rescataron ese mensaje, con matices, como Smiths, y Depeche Mode.

Pero, como es de conocimiento público, al suicidarse Ian Curtis, su vocalista, el resto del grupo tomó la decisión de continuar. Los primeros batacazos los dio a fines de los ochenta, donde su música combinaba, en perfecta arquitectura, electrónica, voces angustiadas, pero potentes y letras introspectivas.
 
Dos de sus primeros éxitos fueron Blue Monday, Perfect Kiss, ritmos repetitivos pero no cancinos, coros de gemidos, y música que puede y lleva al baile (aunque uno no sepa, por lo general, de qué diablos trata la canción). Algo muy habitual en el rock, y que dejamos para otra vez.
 
Sin duda, el éxito más notorio del grupo (y tal vez el más manoseado) es Bizarre love triangle, convertido un clásico del grupo y fijo en cualquier fiesta o discoteca. El video es fantástico y mezcla la música con planos y contraplanos, y un diálogo donde se muestra el rostro de una mujer muy parecida a la actriz sino-estadunidense Lucy Liu. Y otra escena a un hombre lanzándose al vacío, pero como buen inglés, bien enternado, por supuesto. 
 
Para los noventa, y quizá para refutar que no siempre son tan depresivos como se les podía señalar, lanzaron el festivo World in Motion, en homenaje a su selección de fútbol, y se les aprecia con ídolos de aquel equipo como Paul Gascoigne, y al gran John Barnes.
 
Pero quizás - y discúlpenos sus fans- para nosotros la mejor de sus canciones es Regret. Una melodía melancólica y alegre a la vez (o por decir lo menos, esperanzadora), que menciona que "si se trabaja cada día se llegará ser una estrella", y fue, tal vez, su último éxito notable, y existe un video (versión Baywaych), aquella serie en la que actuaba David Hasselhoff, y donde lo más destacable, era, por supuesto, las escenas donde Pamela Anderson, Jazmine Bleeth y Nikki Cox, corrían por la playa en traje de baño. Otro de sus últimos éxitos fue Touched by the hand of God, donde en un estilo ochentero le saca la lengua a los metaleros.
 
En los últimos años, la banda, que viene sin el baterista Peter Hook, no ha tenido éxito alguno. Esperemos que nos sorprenda.
 
The Cure y Robert Smith, el bufón del wave – pop
 
El caso de The Cure tiene sus particularidades. Aparecida en 1979 como The Easy Cure, Smith, el fundador, redujo el nombre a The Cure, que se relaciona, según se dice, a una etapa de la adicción a la heroína. Pero que sepamos, el cantante no tiene esas aficiones. Sus hábitos eran (¿son?) más bien naturalistas. El propio vocalista ha confesado que ha experimentado con todas las drogas alucinógenas. Así que la heroína no está, que sepamos, ni estuvo en su lista.
 
Musical y estéticamente hablando, Smith es muy distinto. Comenzó cantando canciones de Jimi Hendrix (sí, Jimi Hendrix), y aparece en la comparsa con Siouxsie, interpretando un tema de los Beatles, Dear Prudence. Su peinado de batido y sus labios delineados parecen ser deudas enormes con, por lo menos, la estética de Bowie. Y el atuendo negro le ganó al grupo el mote musical: dark (oscuro).
 
Todos los miembros del grupo han rechazado estar siempre tristes. De hecho, algunas de sus melodías parecen alegres e invitan al baile. Why can’t I be you es una de ellas, donde el vocalista aparece disfrazado de negro cantando una canción con toque de jazz, y es un homenaje a Louis Armstrong.
 
Kill an arab se basa en La peste de Camus, donde se escuchan acordes que nos remiten al medio oriente, le valió a la banda ser acusada de racismo, algo que negó.
 
Boys don't cry, del celebérrimo disco de vinilo Standing in the beach que sonó en Lima en 1986, es de 1979, y es un testimonio de frustración amorosa adolescente e In between days está en esa línea. Greiding halt es punk, dura y oscura. Primary es más sombría y post punk, si se quiere. Podría ser, tranquilamente, una melodía de Joy Division.
 
Close to me, el primer éxito artístico y comercial del grupo, es una belleza pop en miniatura con un video impresionante, donde Smith - que también ha incursionado en la literatura - le saca sonidos a un peine, con sonidos que parecen extraídos del jazz, mientras todo el grupo encerrado en un ropero cae hacia un acantilado.
 
I will always love you es otro clásico. De atmósfera triste, y con el fondo que se asemeja a una pecera, se evoca al amor eterno. El vocalista ha confesado que es un tributo a su esposa, con la que no tiene hijos. Pero él tiene 40 sobrinos, no sabemos si todos políticos. Let's go to bed, es alegre y de toque, pasos, y vestimenta excéntrica.
 
Smith es el líder de la banda, ha admitido una evolución en su carácter, y que peleaba constantemente con sus músicos y sus asistentes (suponemos, entre ellos, su bajista, Simon Gallup), a quienes les decía muchas veces que no quería verlos nunca más.
 
Formado en un colegio cátolico, estuvo a punto de suicidarse a los 25 años. Otras historias hablan de una ocasión, en que el baterista estuvo tan drogado que tuvo que ser reemplazado por un perro, y que Smith anduvo por aquí a mitad de los 80, si mal no recordamos en el Cusco, y casi de incógnito, suponemos.
 
Los videos de The Cure son montajes teatrales. Los músicos no sólo cantan. Actúan en medio de montajes. Así se les puede ver en Love cats (basada en Los aristogatos), Caterpillar, Boys don't cry, Why cant I be you. Y bailar.
 
Smith odia bailar, pero sale bailando. Y muchas de sus canciones también parecen sueños, como Friday I'm in love, de 1992, quizá su último éxito masivo, junto con Mint Car, en un video que recuerda los años 50. Just live Heaven tiene una atmósfera escapista, pero bella, al igual que High. The 13th demuestra el gusto de Smith - a quien podríamos llamar por su atuendo y su actitud, el bufón del wave-pop - por la música latina.
 
Estas dos megabandas las veremos en un lapso de sólo 15 días. Quien lo diría. Que pasen los siguientes. Sugerimos AC/DC, y David Bowie y se habla de Los Rolling Stones, ni más ni menos…por mencionar sólo algunos.