Invierte.Pe y el desafío en la reconstrucción
La actual situación de emergencia en varios departamentos del país requiere la adopción de acciones técnicas concretas y realistas para elaborar un Plan de Reconstrucción Nacional coherente (Plan Integral para la Rehabilitación y Plan para las heladas y friaje).
El sistema de programación multianual y gestión de inversiones Invierte.Pe tiene un desafío: ser un instrumento eficaz y efectivo para lograr la reconstrucción de la infraestructura.
Luego de la emergencia, el país debe rehabilitar y reponer la infraestructura pública afectada por El Niño Costero. No se tienen cifras del costo, todas son aproximaciones, pero se estima en miles de millones de soles.
Carreteras, puentes, sistemas de agua y saneamiento, colegios, centros de salud y programas de vivienda son inversiones por ejecutar. El principal desafío es corregir los errores pasados en el diseño de las obras, así como en su ejecución y gestión.
Un primer error que se tiene en el punto de partida es que para elaborar las acciones de mediano y largo plazo del Plan de Reconstrucción, no se tiene en cuenta al Centro Nacional de Planeamiento Estratégico – Ceplan, cuando es sabido que debe ser el ente conductor de las Inversiones Públicas, y no el MEF que con todos los poderes que se le otorgan, no nos lleva a cerrar las brechas pequeñas y medianas en el largo plazo.
Invierte.pe ha puesto énfasis en la programación y el planeamiento, y en el seguimiento de las futuras inversiones. Sobre lo primero, significa que los proyectos e inversiones de la reconstrucción deben ser consistentes con los planes de ordenamiento territorial y de zonificación. En torno a lo segundo, la reconstrucción es importante para tener un inventario de activos y un catastro de infraestructura. Necesitamos realizar acciones permanentes de gestión de inversiones que se sustenten en instrumentos técnicos, documentados, de fuentes confiables.
Pese a esto, no se le da importancia al CEPLAN, institución que ya debería tener elaborado un Plan Nacional de Desarrollo efectivo, que incluya a las regiones y gobiernos locales, incorporando las brechas en salud, educación, transporte, vivienda, saneamiento, porque es importante establecer criterios claros.
Al mismo tiempo, resulta fundamental ejecutar una reestructuración inmediata del Estado y en el CEPLAN - tal como se prometió en la campaña - para darle el lugar que le corresponde a este último, asignándole las funciones para la que está preparado: servir de referencia al presupuesto público, programar la inversión pública; promover la inversión privada, el fortalecimiento de los gobiernos regionales, locales y la reforma del Estado.
¿Con las acciones de Invierte.pe se va a incrementar la inversión pública, o se va a mejorar la rentabilidad para la población con el Multianual de las Inversiones de los sectores, donde con el SNIP se exigían prebendas, para el gasto público? Esto es totalmente relativo. La aplicación de Invierte.pe no debe crear un mercado negro en las Oficinas de Programación para declarar viables los estudios, lo que generó que existan PIP en el banco de proyectos mal formulados y, lo más grave, una vez que se ejecutaban, no generaban ningún beneficio a la población, con obras paralizadas, abandonadas, mal ejecutadas y actualmente con arbitrajes, etc.
Adicionalmente en la reconstrucción, la formulación de los estudios de las inversiones exige un enfoque de gestión de riesgos, necesario para reducir la vulnerabilidad de las obras. Dichos estudios deben ser encargados a técnicos de experiencia y probidad, que no copien ni peguen información para cumplir con un requisito. Aquí las sanciones a las consultoras que mientan, trasgredan la información y que elaboren estudios mal diseñados deben ser administrativas y penales.
Una preocupación es la estimación de los costos de inversión. Invierte.Pe puede trabajar con parámetros y líneas de corte a partir de las experiencias confiables que maneja cada sector. Ello, por supuesto, requerirá de un esfuerzo importante del Estado por hacer claros los costos unitarios, y publicarlos para que sean auditados en control posterior.
En la etapa de ejecución y gestión, el aporte de Invierte.Pe apunta al desarrollo de un adecuado sistema de seguimiento y monitoreo. Cada entidad debe poner énfasis en los avances de los resultados de las inversiones. ¿Se ejecutó lo que tenía que ejecutarse? ¿Aumentaron los costos?, ¿Se sustentaron técnicamente? ¿Está funcionando la obra luego de la inversión? ¿Se han tomado las medidas de protección suficientes? Esta responsabilidad es igual o más importante que la aprobación de los estudios, que no deben ser dados a las consultoras que crearon el mercado negro del SNIP y que pertenecen a ex funcionarios del sector público. Los ejecutores deben entender que la obra debe estar en funcionamiento.
Según el Decreto Legislativo N° 1252 que creó Invierte.pe la programación de inversiones debe ir acorde con la programación presupuestal, para luego obtener una adecuada operación y mantenimiento. Las condiciones de sostenimiento requieren asegurar los recursos tanto en el presupuesto como en equipos humanos. Aquí se requiere un esfuerzo especial de los gobiernos locales y regionales.
El CEPLAN debe estar orientando a generar resultados positivos en las regiones, gobiernos locales y en los sectores sociales que, coadyuve a generar políticas y estrategias serias a nivel regional, provincial y distrital, y no solo formular documentos que pocos leen y aplican.
No se debe nombrar ninguna autoridad para la reconstrucción ni llamar burocracia para conducirla, para ello están las Oficinas de Promoción Multianual de Inversiones de cada sector, y sus unidades formuladoras y ejecutoras de inversiones comprometidas en el tema. Educación, vivienda y construcción, transporte, agricultura y riego que, tienen la información y la experiencia profesional suficiente en la construcción y rehabilitación de obras. Definamos bien las acciones en la elaboración y responsabilidades de los planes. No nos lamentemos después.