La "vendimia" del fútbol peruano
Última Hora lo reveló en 1956
Esta historia, el primer “destape” de un caso deportivo, especialmente en el fútbol, pasó a llamarse “La Vendimia en el Fútbol” y lo publicó “Ultima Hora en el segundo semestre de 1956, poniendo al descubierto, una serie de maniobras en que estuvieron involucrados jugadores, dirigentes, personal auxiliar, todos confabulando para hacer perder la categoría al club “Carlos Concha” del Callao.
Los datos iniciales los llevó al diario, el joven redactor José Luis Cabada, muchacho nacido en el Callao y buscaba afanoso las noticias deportivas del puerto. Eran “primicias”, que le contaban los personajes cercanos a los clubes comprometidos y que resultaron tan ciertas, que el diario le brindó cuatro primeras páginas, pues los aficionados esperaban con ansiedad las ocurrencias de tan terrible caso.
Como es natural, las emisoras radiales también se sumaron a las investigaciones de que efectuaba Cabada, sin figurar en el diario, por razones obvias, aumentando el interés del público por las noticias que propalaba diariamente el popular vespertino sobre la “Vendimia en el Fútbol”.
¿Por qué bajar al “Carlos Concha”, que ese año había ascendido a la Primera División Profesional? Porque inusitadamente ese equipo había jugado una buena primera rueda, sin tener los mecenas que ayudaban a otros clubes, como el “Mariscal Sucre”, y el “Atlético Chalaco”, y había quedado quinto a mitad de la tabla.
Cabada**: del Callao y con “agallas”
José Luis Cabada tenía 23 años e ingresó ilusionado al periodismo deportivo. Llegaba a la redacción del viejo local de “La Prensa” y “Ultima Hora”, en el jirón de la Unión, cargado de noticias, pues en ese año, de los diez clubes de la órbita profesional, tres eran del vecino puerto.
El “Atlético Chalaco”, el de la “garra porteña”, que había sido fundado en 1902, el “Sport Boys”, también señero y primer campeón profesional en 1951, y el recién ascendido “Carlos Concha”.
Cabada era chalaco, no se perdía los entrenamientos de los tres clubes, pues tenía confidentes que lo alimentaban de informaciones. Uno de ellos sería su principal fuente de información en la “vendimia” de algunos de sus jugadores y estrategia de dirigentes para evitar el descenso.
La primera información aparece el lunes 12 de noviembre de 1956, cuando “Sport Boys” le gana 4-2 al “Carlos Concha” (en la primera rueda había ganado el “Concha” 4-1) y se deja entrever que algunos jugadores como el arquero Guerrero y los defensas Marchena, Anglas y Talledo habrían sido sobornados para no dar todo de sí. Así lo recriminan los dirigentes José Ferreti, Eulogio Carrera y Carlos Bustamante, en camarines. Los jugadores lo niegan faltaban solo tres fechas y según las informaciones de Cabada, las reuniones en la oficina de Claudio Martínez Mur en el edificio Boza, detrás del monumento a San Martín, eran frecuentadas por varios dirigentes, entre ellos el presidente del Sucre, Carlos Cárdenas, propietario de una de las fundiciones más importantes de la capital. Allí se habrían tramado las siguientes acciones para hacer bajar al Carlos Concha.
Descubren a sobornador de arquero
Se informó que el arquero Santos Guerrero, titular del “Carlos Concha” había identificado a Almenara como la persona que le había ofrecido dinero con la finalidad de no atajar bien ante el equipo de la “furia”.
“Lo conozco solo por fotos. Y fue tan insistente que me dijo que para ir a conversar a su casa al respecto. Me ofrecían un jugoso contrato para la siguiente temporada”. Manifestó Guerrero, según consta en la denuncia correspondiente efectuada en la Novena Comisaría.
Y entre los denunciados también se incluye a un futbolista de Universitario, al goleador Rolando Rodrich, quien según versión de Santos Guerrero acompañó a Almenara en la primera rueda para solicitarle no actuar contra Chalaco. “Los dos, con Rodrich, somos piuranos, por eso tenemos esa relación de amigos”, manifestó el arquero con voz serena en la Novena Comisaría.
El presidente del “Atlético Chalaco”, Claudio Martínez, manifestó que es un hombre de honor y que si su club queda último, no tendría problemas en perder la categoría, pues “soy fiel cumplidor de las leyes”. Más o menos lo mismo declaró Carlos Cárdenas, titular del “Mariscal Sucre”, quien agregó que iba a contratar un abogado para limpiar su nombre y el de su club.
Al día siguiente, miércoles 5 de diciembre, se vuelve a publicar en lo alto de la primera página de “Ultima Hora”, con letras grandes e siguiente titular: “Policía va descubriendo el pastel.
Cayó hombre clave: Caso de soborno
En la información se menciona que Jorge Montero, ex jugador del “Atlético Chalaco” y “hombre clave” en el caso, fue detenido por la Policía, a la una de la madrugada y llevado a la Novena Comisaría, donde se encontraba ya preso e incomunicado Carlos Almenara Graña, el ex dirigente porteño. Ambos fueron investigados por el intento de soborno al arquero del “Carlos Concha”, Santos Guerrero y fueron careados en la seccional. De fuentes policiales se supo que en las siguientes horas podrían ser detenidos otros jugadores y dirigentes comprometidos en este “affaire” que afectaba al fútbol peruano.
El comisario, capitán PNP Víctor Landázuri, declaró que con el parte policial respectivo se oficiará a la Asociación Central de Fútbol y a la Fiscalía, correspondiente. El diario solicita la intervención de la Federación Peruana de Fútbol, don José Salom Maúrtua.
Acaba match de policías vs tongueros
El Poder Judicial ha decidido tomar el caso debido a la contundencia de las pruebas, que son un verdadero foul al fútbol peruano.
En un recuadro titulado “Chalaco” le tira la pelota al “Concha”, el presidente del cuadro chalaco, Claudio Martínez Mur, quien se hizo presente en la Comisaría de Petit Thouars, sostuvo una acalorada discusión con el diputado por el Callao y ex dirigente del “Boys”, Rómulo Asseretto, en uno de los pasillos de la seccional. Martínez dijo que el hilo se había roto por la parte más delgada. “Esto es una maraña tejida por el “Carlos Concha”. ¿Quién sabe si sus dirigentes han planeado todo esto?, dijo Martínez, agregando que no puede dar crédito a las acusaciones de Montero contra el gerente del “Chalaco” Luis Gordillo.
Y como se temía en cuanto a los resultados de la última fecha, en los partidos jugados el viernes 7 y sábado 8 de diciembre, todos se dieron para dejar en último lugar al “Carlos Concha”, quien perdió 0-4 con el “Sporting Cristal” que se coronó campeón.
“Sucre” le había ganado al “Muni” por 2-1, “Iqueño” hizo lo propio con “Universitario” por 2-0, mientras “Ciclista” empató convenientemente, 0-0 con “Chalaco” y “Boys” le ganó 4-0 al “Alianza”.
La tabla de colocaciones terminó con “Cristal” campeón con 30 puntos, segundo “Alianza” con 27, tercero “Municipal” con 20, cuarto “Universitario” con 18, sexto “Iqueño” con 15, sétimo “Ciclista Lima”, “Atlético Chalaco” y Mariscal Sucre con 14 y décimo y último “Carlos Concha” con 13 puntos... ¡a la baja!
Al día siguiente martes 11 de diciembre “Ultima Hora” vuelve a publicar en su primera página y a grandes letras: La justicia llama a 72 personas.
Seis son dirigentes y 66 cracks
Lo peculiar es que los titulares son a cuatro columnas, mientras que en la columna de la izquierda aparecen los nombres de los 72 involucrados en letras de tamaño notable, debidamente enmarcados. Los dirigentes son Plácido Galindo, presidente de “Universitario” y de la Asociación de Fútbol, Claudio Martínez, Carlos Cárdenas, Tomás Ibaye, Juan Bromley y Roque Crovetto.
En la página 3 se menciona que la justicia llamó a los personajes mencionados para tomarles sus manifestaciones, las que demoraron 7 horas. Los implicados debieron esperar todo ese tiempo recluidos en la Cárcel Central de Varones.
Y en la última página del diario con el titular arriba, dice: ¡Basta de contemplaciones!
Afición exige reorganización de la asociación de fútbol
En el texto se menciona la indignación de la afición del fútbol por este montaje que le hace tanto daño a su imagen y que salpica al deporte en general. Por tal razón “Ultima Hora” solicita la rápida intervención del Comité Nacional de Deportes y de la Federación Peruana de Fútbol para sancionar ejemplarmente a los culpables.
Aquí, en este diario, y en poder de las autoridades, están las pruebas del engaño. Nunca más se deben repetir los bochornosos sucesos que tuvieron lugar el viernes 7 y sábado 8 de diciembre de 1956, en el Estadio Nacional.
Lo que comentó el maestro “Cuatacho”
El reconocido periodista Guillermo Cortez Núñez, quien había pasado de las revistas “Equipo” y “Crack”, donde se desempeñaba como director, a la jefatura de redacción de “Ultima Hora”, donde también escribía deportes se ocupó del problema de la vendimia.
De retorno de los Juegos Olímpicos en Melbourne, el tema del escándalo en el fútbol, en su columna “Barra Brava”, en la última página de esa edición, escribió: “Jamás se había visto en el deporte peruano un escándalo de esta naturaleza. La historia del fútbol peruano no había sufrido todavía la afrenta de requisar una maquinación fraudulenta de tantas proporciones. Se malició, alguna vez, que uno y otro partido no habían tenido un desempeño normal. Pero lo que nunca se había visto es el montaje meticuloso de una gran maquinaria con la precisión del papel que debían desempeñar cada una de las piezas en forma inescrupulosa, produciendo una serie de partidos prefabricados”
*La Revolución del Periodismo en el Perú, Roberto Salinas Benavides, Justo Linares Chumpitaz, pp. 152-153-154. Lima 2012, Talleres Gráficos de la Universidad Alas Peruanas.
**José Cabada (jcperunews@gmail.com), periodista que actualmente reside en Estados Unidos y vuelve con frecuencia al país. Sigue escribiendo y alentando a jóvenes valores a incursionar en este esforzado camino de la caza de la noticia.
Texto y fotos: www.voltairenet.org/article190066.html?var_mode=recalcul
26-1-2016?