< Detras de la cortina

Apuntes sobre las reflexiones y la nueva normalidad

El autor recalca que la pandemia ha tenido brutal impacto sobre la economía, la cultura, y la sociedad. www.elcomercio.pe

¿Cuáles serán las consecuencias que dejarán las draconianas medidas adoptadas en la mayoría de países que han sido puestos a prueba por la pandemia de COVID-19? El filósofo Pedro Cornejo en su nota Reflexiones sobre la nueva normalidad: vivir en medio de una pandemia, del 16 de junio en "El Comercio" aborda estos temas, que alcanzan no solo a la economía. sino también a la cultura, el entretenimiento y la vida social (diurna y nocturna).

Corneja cita en su imperdible artículo al filósofo italiano Giorgio Agamben, autor de libros como El poder soberano y la nuda vida (1995) y Lo que queda de Auschwitz (1998).

En su nota del 11 de mayo (“Bioseguridad y política”), Agamben expresa su preocupación por lo que se plantea como "un nuevo paradigma de gobierno de los hombres y las cosas”. Para ello menciona el libro Tempestades microbianas (2013) de Patrick Zylberman, quien advirtió hasta qué punto la seguridad sanitaria se estaba convirtiendo en un factor crucial de las estrategias políticas estatales: sea para construir, sobre la base de un posible riesgo, escenarios alarmistas que validen decisiones de corte autoritario; o para conseguir —en nombre del civismo— la máxima adhesión de los ciudadanos a las instituciones de Gobierno.

De este modo, el ciudadano "ya no tiene un derecho a la salud (health safety), sino que pasa a estar jurídicamente obligado a la salud (biosecurity)”.

Si antes la seguridad había servido para aplicar recortes sustanciales a las libertades,ahora “la bioseguridad ha demostrado ser capaz de presentar el cese absoluto de toda actividad política y de todas las relaciones sociales como la forma más elevada de participación cívica”.

El autor infiere algo que resulta bastante obvio. Las medidas de confinamiento (o encierro, como las llamamos nosotros) constituyen la negación de la vida en común y, por ende, del ejercicio de la ciudadanía tal y como la habíamos conocido hasta hoy, y aspectos  como el llamado “distanciamiento social”-¿a quién se le ocurrió la frasecita?- es anunciado como el eje en torno al cual girará la "nueva" política, mientras se anuncia la sustitución de los encuentros personales por visiones en línea, a través de tecnología, soslayando, por completo, la naturaleza gregaria del hombre.  

En suma, podríamos afirmar-resumiendo lo dicho por el filósofo y crítico de rock- que la pandemia que todos padecemos, está directa o indiractamente presentando un modelo de vida casi sin contacto físico, ni conversaciones frente a frente, que ocurre también en otros ámbitos como la relación médico-paciente (exceptuando, entre unos pocos, los de CV19), y el educativo, donde la relación alumno- maestro, puede convertirse, por obra y gracia del virus,en algo así como una entrevista vía satélite.  

Con la pandemia no solo está amenazada, sin duda, nuestra salud, sino también nuestra esencia como seres humanos, y ni que decir de nuestra libertad.