Detras de la cortina

Vueltas de campaña

Para muchos, las declaraciones de la señora Keiko Fujimori en Boston han constituido toda una sorpresa, pero si la vemos desde los ojos de desconfianza con que vemos a la política, en especial a la peruana, son perfectamente entendibles.

Afirmar que el diagnóstico de la CVR fue positivo, es discutible, por decir lo menos. Lo que resulta indiscutible es que la señora Fujimori trate de captar votos y reducir anticuerpos, pero todos sabemos que esa tarea puede ser imposible, y hasta contraproducente, primero porque para hacer lo primero tendría que reducir lo segundo, y lo que  hoy podemos señalar es que el antifujimorismo puede ser tan sólido y duro como el albertismo.

Sin embargo, según la tesis del ex congresista y vicepresidente Francisco Tudela, lo que ha hecho la señora Fujimori es decir un discurso que sea del halago de Washington. El discurso de Boston, no fue, según Tudela, interno, sino buscó posicionarse en Washington como una lideresa que defiende los derechos humanos. Que esto sume o reste es diferente.

En estas semanas también se ha salido a declarar sobre la posibilidad que los militares apoyen la tarea de la seguridad ciudadana, problema en el que estamos sumidos y que originado la campaña “Chapa tu choro”. Y a la que podíamos agregar, como dice el periodista Enrique Castillo, tu fiscal, y tu juez. No vaya a ser que algún delincuente salga libre.

En un primer momento, los líderes de los partidos se manifestaron en contra, para luego manifestar su apoyo con reservas. Esta campaña puede tener una connotación salvaje para muchos, pero no le podemos pedir a los ciudadanos que tengan paciencia y esperen que las cosas mejoren. Es el estado el que debería responder, pero en el Perú el ciudadano no puede esperar a que el estado solucione sus problemas. Si no, confiaría en la policía para su seguridad, y no en vigilantes, rejas y perros.

Otro de los giros sorprendentes fue acerca del caso Petro Perú, en el que nuevamente la señora Fujimori defendió la posibilidad que la empresa invierta en exploración. ¿No está enterada de cómo encontró el gobierno de su padre la petrolera estatal? Es que claro, como señaló José María Salcedo, petróleo se escribe con P de política.

Las declaraciones de Mario Vargas Llosa no sorprenden. El escritor critica con razón los errores y delitos del fujimorismo, pero no dice una palabra sobre los errores y denuncias de corrupción del gobierno que promovió. Crítico del fujimorismo, llamó a esta una dictadura sangrienta. Ni siquiera la abusiva, ineficaz y corrupta tiranía velasquista, - a la cual suscribió y apoyó - califica como tal.

El expulsado congresista y ex vicepresidente Omar Chehade se queja y reclama sobre el papel de la señora Heredia en el gobierno, las denuncias de corrupción, y jura y perjura que no participará en política.

A pocos meses del proceso electoral, éstas son sólo algunas vueltas de campaña.