El martes 11 de agosto el diario “El Comercio”, nos comunica que “la tortura tiene nombre” en Lima, la Av. Javier Prado, y su recorrido caótico entre el óvalo Monitor y el óvalo Huarochirí en La Molina, concordamos pero debemos agregar se presenta en la mayoría de sectores de la Av. Javier Prado y muchos otros en Lima, no cabe duda.

Nos cuentan de un recorrido que hizo en bus por la Av. Javier Prado, en dirección que oeste-este, del paradero a la altura de los Cedros, hasta lograr pasar el semáforo en el cruce en la Av. Arenales. Nada menos que una hora (miércoles 26 de agosto, de 5 a 6 de la tarde). Y esto ocurrió sin que se hayan producido accidentes, manifestaciones o marchas, etc.

Medios de comunicación como “El Comercio” y otros, y muchos connotados urbanistas y expertos hace tiempo sugieren medidas para terminar con esta situación. Por ejemplo, que Lima tiene que contar con avenidas adicionales, paralelas a Javier Prado, Primavera, Benavides, etc. Si se pretende lograr que algún día un tránsito fluido, este-oeste, y viceversa. Los limeños los necesitan y lo agradecerían.

Se está de acuerdo que el problema son muchas de las intersecciones. Muchas de éstas son de tránsito más rápido, como la Av. Arenales, y por lo tanto llegan a la avenida principal en menos tiempo, y por consiguiente bloquean el flujo de tránsito en la avenida principal (en este caso Javier Prado). Éste es un problema antiguo que los usuarios sufren diariamente sin que nadie, Ministerio de Transporte, Dirección de Transporte, Dirección de Tránsito, u otra autoridad han tomado medidas efectivas. Sólo paliativos.

Cuando no había cámaras, sistemas de video, ni celulares, y ocurrían estos atascos, se podía ver oficiales de tránsito, en moto, corriendo de una intersección a otra, y ordenando detener el tránsito en éstas para desahogar y hacer más fluido el tránsito en la avenida principal. Funcionaba, y se agradecía.

Ahora no hacen nada y tres policías pierden el tiempo en la citada intersección (Av. J. Prado/Av. Arenales), por lo que pueden hacer sin ayuda. Se ve a menudo y lo sufren mucho.

Se pueden decir más cosas, pero creemos que la más importante es que Lima cuente con una Autoridad Única de Tránsito, hace tiempo reclamada.