La baja en la Bolsa de Valores y la economía china
Desde la semana que empezó el 6 de julio la Bolsa de Valores de Shanghái en China aceleró su caída, y hasta el miércoles 8 llegó a bajar hasta un 30% (en menos de un mes), después de haber subido un 150% desde junio del 2014 a junio del 2015. El miércoles 8 cayó 8.2%, el llamado “miércoles negro”. 747 empresas cayeron un 10% en su valor ese día, el límite permitido. Desde el 13 de junio empezaron a descender los precios en la Bolsa.
Lo que está ocurriendo en China es una corrección en los precios de la acciones de la Bolsa de Valores. El problema es hasta qué punto puede bajar el valor de las acciones y como esto afectará a la economía china, y la del mundo, dado el peso de su economía.
La Bolsa de Valores de Shanghái se recuperó 5.8% el jueves 9, cerrando el índice a 3709 (y el viernes 10 subió 4.5%), después de las medidas del gobierno, que incluyeron prohibir por 6 meses las transacciones por parte de accionistas que tengan más de 5% de las acciones de una empresa, ordenar a que algunas empresas públicas o fondos de pensiones del gobierno que compren acciones, y prestando dinero a las compañías corredoras de Bolsa para que lo hagan. Más de la mitad de las empresas, 1300, que cotizan en Bolsa han suspendido sus transacciones para evitar perder más.
El gobierno también amenazó con tomar acciones contra las ventas "especulativas de corto plazo". Esto es el capitalismo con características chinas, donde el Estado interviene y usa todos los mecanismos a su alcance, y demuestra también que el mercado de valores en China es aún poco desarrollado.
El problema es que muchas personas se prestaron de los bancos para invertir en la Bolsa de Valores, e incluso algunos se dice hasta vendieron sus casas para eso. La mayoría de los que invierten en China son pequeños ahorristas, algunos sin experiencia financiera, que compraban desde junio del año pasado. Todas las acciones subían y parecía una apuesta segura para ganar e invertir en la Bolsa. Se dice que hay casi 90 millones de pequeños inversionistas, y constituyen más del 80% de los que invierten en el mercado. Tienen mentalidad de rebaño. Así como antes compraban de todo cuando la Bolsa estaba en alza, ahora tratan de vender todo cuando los precios bajan.
Una de la razones para que las acciones subieran tanto es porque el último año el gobierno chino, a través de los medios de comunicación, estuvo promoviendo la compra de acciones, y la subida en la Bolsa de Valores. ¿Por qué? Decían que la economía china seguiría creciendo, quería que la gente invierta para que tengan ganancias y así incrementar el consumo interno, que es visto como el pilar de la nueva estrategia de crecimiento chino, para no depender de las exportaciones y la inversión, como había sido hasta ahora.
Es grande la caída que ha experimentado la Bolsa de Valores en China, pero si se le comparar con otras, no lo es tanto (aún por lo menos). Por ejemplo, entre el 2007 y 2008 la Bolsa de Valores de China había caído un 70%. Del 2007 al 2008 la Bolsa de Valores de Nueva York cayó un 50%, pero después se recuperó con creces. En la Gran Depresión de la década de 1920 la Bolsa de Nueva York cayó un 86%. La Bolsa de Valores de Tokio cayó del pico de fines de 1988 del índice Nikkei de 39,500 a 7,500 a fines del 2012. La semana pasada estuvo en 20,500.
¿Cuáles podrían ser los efectos en China?: La pérdida de riqueza de los inversionistas serian de los nuevos que entraron recién al mercado, pues la mayoría quizás ha ganado, pues la Bolsa había subido 150% hasta junio del 2015 y al disminuir un 30% ahora, aún estarían ganando. El problema es de los que invirtieron últimamente y compraron cuando las acciones ya estaban alcanzando su máximo valor, y de repente estas caen hasta un 30%. Esto podría ocasionar una disminución del consumo interno, pero lo interesante es que esa caída de ingresos, por la caída de la Bolsa, afectaría solo al 15% o menos de las familias chinas (que son las que han invertido en Bolsa parece). Invertir en acciones es un fenómeno más urbano y por eso más limitado. La mayoría de familias no tienen acciones (ni hipotecas). Por otra parte, el consumo interno representa menos del 40% del PBI chino (porcentaje que el gobierno quiere elevar)
Pero hay un temor del gobierno de que esto genere inestabilidad social, necesaria para el continuo crecimiento de la economía china, y por eso se está asegurando de tomar todas las medidas para que eso no suceda. Lo bueno es que la economía china crece aún al 7%, y es una economía de 10 billones de dólares (aunque se dice que esa caída de 30% ha representado casi 3 billones de dólares perdidos –algo menos de 10 veces el tamaño de la economía griega por ejemplo-, que en todo caso era riqueza en papeles que se generó en forma especulativa y no existía hace un año).
Los efectos fuera de China
Po ahora la caída no afecta en forma directa a extranjeros, pues los extranjeros poseen menos del 10% de las acciones en la Bolsa de Valores china (por límites impuestos por el gobierno). Por otro lado, las bolsas asiáticas han caído en consonancia con lo que pasa en China.
En resumen, lo que ocurre en China es una corrección del alza desmesurada en la Bolsa de Valores que hubo en el último año, pero el gobierno está tomando todas las medidas para evitar que sigan cayendo los precios de las acciones. Sin embargo, la volatilidad de seguro continuará, y los perdedores serían los pequeños inversionistas que ingresaron un poco antes que la Bolsa empezara a caer de su pico del 12 de junio.
La economía china seguiría creciendo, pues cada vez hay una mayor clase media que crea una enorme demanda para la producción china, y también la creciente urbanización (53% de su población ya es urbana) crea todo tipo de necesidades y demanda.
*Economista, catedrático UNMSM