La historia del 5 de abril
“He acordado y decreto: El Gobierno de Chile declara la guerra al gobierno del Perú. El ministro de Relaciones Exteriores comunicará a las naciones amigas esta declaración…”. Así lo dijo y lo firmó el presidente sureño Aníbal Pinto, un día como hoy, el 5 de abril de 1879.
Al día siguiente del estado de guerra que se prolongaría por más de cuatro años, el Perú, gobernado por Mariano Ignacio Prado, declaró el casus foederis, es decir, que el Tratado de Alianza Defensiva entre Perú y Bolivia suscrito en 1873 entraba en vigor.
Cerca de 20 mil muertos entre civiles y militares fue el saldo del conflicto armado que finalizó el 20 de octubre de 1883, cuando Miguel Iglesias firmó el Tratado de Ancón perdiendo ipso iure y para siempre la provincia litoral de Tarapacá y solo después de 50 años -etapa de la chilenización-, el 3 de junio de 1929, ambos países firmaron la paz definitiva por el Tratado de Lima.
Llamada también Guerra del Pacífico o del Guano y del Salitre, lo cierto es que se trató de una contienda bélica desigual. Los esfuerzos de Antonio de Lavalle con su viaje a Santiago para evitarla fueron en vano porque Chile estaba decidido desde los tiempos de Diego Portales. Esa fue la verdad.
La guerra fracturó la relación bilateral que el Perú desde 1929 se ha esforzado en reconstruir, pero que Chile no ha hecho nada para sellarla a pesar del fallo de La Haya de 2014. No más 5 de abriles, pero le exigimos a Chile la reciprocidad y la buena fe, indispensables para una mejor relación vecinal.
*Analista Internacional
*Publicado en el Diario Correo 5/4/16
*Reproducido con la autorización del autor