Con México compartimos la lengua, parte de nuestra cultura, la religión, y en estos tiempos, los mismos problemas. Sin embargo, su historia es dura y -además- desconocida por muchos. En 1929, luego de una prolongada guerra civil donde perecieron miles de personas, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) tomó el gobierno y el poder, que no cedería hasta el año 2000, cuando asumió Vicente Fox del PAN (Partido de Avanzada Nacional). Para algunos, este sistema le dio estabilidad y lo ubicó al medio entre Washington y Moscú, aunque sus gobernantes- más allá de algún discurso o impasse diplomático- se han ubicado más cerca de Estados Unidos. Para otros, fue un régimen clientelista y corrupto, donde los residentes de "Los Pinos" (sede del ejecutivo mexicano), miembros de un partido predominante se sabían siempre elegidos, incluso antes de la realización de elecciones.
El doctor José Antonio Quintana es un reconocido veterinario mexicano, quien recientemente asistió a un congreso de Avicultura en nuestro país, tiene su propia opinión, y quisimos conocerla en una charla informal. Luego de un sabroso almuerzo en Miraflores y de ver España - Portugal, fuimos por un café y ahí casualmente comenzó la plática. Estando en la mesa, vimos una bolsa de azúcar publicitaria con el nombre Claro, y nos dijo ¡Ah…sí. El de los móviles”. Luego de confirmarnos que es el hombre más rico del mundo (superando a Bill Gates), nos dio un dato, bueno, una versión, interesante: “Dicen que fue testaferro de Salinas De Gortari”. Eso sí nos sorprendió. Lo que leímos alguna vez en América- Economía era que es hijo de un inmigrante libanés (al igual que la bella actriz Salma Hayek) y que hizo su fortuna solo. “Por supuesto, añadió, esto no está confirmado”. Y éso no sería lo único sorprendente que reveló sobre Salinas de Gortari.
Posteriormente, y luego de caminar por las calles de Avenida Larco, nos encontrábamos en el bar-comedor del hotel y que en ese momento, alrededor de las 4 de la tarde, se encontraba vacío. ¿Demasiado tarde para comer, demasiado temprano para beber?
¿Cómo se encuentra el país 10 años después de la caída del PRI? Nuestro entrevistado nos mira fijamente y dice: “El país está mejor, hay menos crispación. Después de 70 años, la apertura política le ha hecho mucho bien. La gente dijo de esto no. México se había convertido en una dictadura civil”, y le contestamos una perfecta, según Vargas Llosa, a lo cual asintió. “Es verdad” dijo. “Hay un renacer político y se están formando varios partidos”.
¿Y en el aspecto económico ? “Ahí hay cosas por hacer, la pobreza está en el orden del 40% y la pobreza extrema entre 5 al 10%", dice, aunque señala que no maneja las cifras exactas. Pero ojo, añade, estás no son sólo cifras, se convierten en personas, en México son 100 millones -subraya, mientras pensamos que la economía utiliza las cifras para abstraer la realidad,- aunque parece estar en el rumbo correcto", señala nuestro interlocutor.
Si esto es así, ¿Por qué Felipe Calderón ganó por 0.5%, un resultado que puede despertar tantas suspicacias? le dijimos, Quintana no se amilanó y dijo: “Quizás la gente tenía demasiadas expectativas y Fox no pudo cumplir, y a esto se le sumó el carácter complicado de su esposa Martha Sahagún, quien le daba una mala imagen”, nos decía, mientras nosotros recordábamos sus sabrosas imitaciones en el programa cómico “La Parodia”, algo que no le hace mucha gracia. “Sí, pero creo que el presidente de la República se merece más respeto”, nos dijo. Y tiene razón, aunque a veces los políticos, hablando en general, no hacen mucho por merecerlo.
Vicente Fox en realidad, cuando estaba con blue jeans y un sombrero, parecía más un vaquero texano que un presidente latinoamericano, aunque claro, había sido presidente ejecutivo de la Coca –Cola México. En todo caso, era una cuestión de estilo.
¿Era Andrés Manuel López Obrador chavista? "La gente lo veía como una esperanza, señala, una alternativa, pero una persona con mediana formación se daba cuenta que por lo menos tenía ideas chavistas y socialistoides. Quitarle al rico para darle al pobre. Eso no funciona..."
Un tema de mutua preocupación es la seguridad. A la inseguridad ciudadana, algo que conocemos los peruanos, se suma el narcotráfico. "El narcotráfico no es mexicano, es una corporación internacional, que en México se ha desarrollado, nos comenta Quintana". Nosotros le preguntamos cómo le va al gobierno en ese aspecto, y nos señaló que hay avances, y algunos retrocesos, lo que denominó “efecto cucaracha”. ¿Cómo es eso? “Fácil. La exterminas en un lado y aparece en el otro”. Como lo que ocurre en Colombia, de donde se desplaza al Perú, le recordamos.
¿Por qué el estado mexicano no puede avanzar más rápido? "Porque se enfrenta a un enemigo más poderoso que él, y hay que reconocerle al presidente Calderón que ha tenido las agallas para enfrentar el problema. El estado le puede pagar 100 dólares a alguien, mientras que los narcos le pagan 500, y aún así nadie está seguro, mientras le recordamos que hace poco Calderón admitió haber licenciado a parte del cuerpo policial por estar vinculado al problema. La vez pasada han asesinado a un candidato con cinco guardaespaldas en una emboscada", enfatiza Quintana, mientras la bruma de Miraflores se hace más notoria y la tarde empieza a oscurecerse lentamente.
En México- añade- han pasado cosas muy raras. En los 90, Luis Donaldo Colosio, candidato priista fue asesinado, luego el caso del Cardenal Posadas (1), que mereció una visita de Juan Pablo II para pedir el esclarecimiento del hecho. Luego se barajan hipótesis poco creíbles como las del asesino solitario. Como en el caso de Kennedy: Oswald detenido por asesinato, luego Jack Ruby lo mata “, enfatiza con rostro de preocupación.
El narcotráfico nos señala – que aquí se ha asociado con Sendero, le señalamos- “es peligroso, porque con su dinero y poder desestabiliza el sistema, engendra violencia, inseguridad y corrupción”. Exactamente, le dijimos no es un problema policial, sino social, y al mismo tiempo planetario. “Y además necesita armas, que no se hacen en México, hay un mercado de las mismas”, asevera.
A propósito de narcotráfico y guerrillas, le consultamos por el FZLN (Frente Zapatista de Liberación Nacional). “El primero de enero de 1994 le declaró la guerra al estado mexicano. Estamos en junio del 2010 y no pasó nada”. En ese sentido, afirma, “Salinas de Gortari hizo algo bueno. Mandó comisionados, habló, negocio, y acto seguido, empezó a hacer obras de infraestructura. Chiapas es una zona muy rica, contiene uranio, ni más ni menos, usado para energía nuclear y pese a tener las mejores hidroeléctricas del país, era de las que estaba menos electrificada. Esa contradicción habla por sí misma”. Una de las zonas más pobres del país con nativos marginados de la sociedad.
Hoy eso ha cambiado, hay carreteras, luz. Sin duda, fue una salida audaz de Salinas. Algo de esa astucia podría tener el Perú y empezar a hacer obras en la sierra sur y en la selva, entre otras cosas. En fin…
¿Qué pasó con el Comandante Marcos? Marcos tenía unos 35 años cuando comenzó su aventura, el primero de enero de 1994, ahora ya debe andar por los cincuenta. Quizás se ha aburguesado, y hasta donde sabemos, no era un campesino pobre, sino provenía de una clase media. Se rumorea que se ha ido a Nicaragua con su esposa.
¿Era un revolucionario, un loco? No hizo la revolución, no atentó contra nadie, ni siquiera fue una revolución social como en Francia del 68. “Creo que era un idealista, subraya Quintana, mientras parecía interesado en seguir conversando, pero… ¿Enfrentar al estado mexicano, unos nativos con pasamontañas y sin armamento?”
¿Cómo ve México en el futuro? le preguntamos. “Me parece que va mejor, pero hay cosas pendientes. A la gente pobre hay que apoyarla sin duda, darle condiciones para el desarrollo, salud, educación. Los jóvenes salen y no encuentran trabajo, - hay que promover carreras técnicas, como en el Perú, agregamos - pero creo que es un proceso, va a demorar mucho, y depende del estado. Igual que acá. Con esa reflexión terminó la charla, y la tarde también.
(1)El Cardenal Posadas fue asesinado en 1993. El hecho se atribuyó a la masonería, un crimen de estado o una balacera entre dos bandas de narcotraficantes.