< Detras de la cortina

¡Renuncie Sr. Ministro de Economía ¡

El crecimiento económico debe ser el objetivo de un país pobre, más en el caso de un país como el Perú, con una presión demográfica del 1.5%, y una proyección de 33.1 millones de habitantes al 2021, donde cada año ingresan al mercado laboral 300,000 jóvenes.

El ministro de Economía hizo estimados del PBI para el 2019, que confunden a los inversionistas. El MEF en el marco macroeconómico multianual 2019 - 2020 estableció 4.2% de crecimiento, en el marco macroeconómico multianual de agosto 2019 indicó 3%.

El Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (Iedep) de la Cámara de Comercio de Lima, informó que la economía peruana crecería 3.2% al cierre del 2019, Scotiabank rebajó drásticamente su proyección del 4% a 3.1%, por lo cual esta cifra es inaceptable. Incluso, el 3% previsto para este año por el MEF, o una cifra menor -esperemos que no- se puede considerar como un estancamiento. Existen algunas proyecciones que nos dicen que corremos el riesgo de experimentar una recesión, que se produce cuando la tasa de variación anual es negativa durante dos trimestres consecutivos, y se genera un decrecimiento de la actividad económica durante un largo periodo.

Estamos obligados a crecer 5% en el PBI anual 20 años por lo menos. Con las cifras mencionadas la población no mejora su nivel vida. Así de simple.

¿Es posible lograr un crecimiento real en el mediano y largo plazo, sin un Plan Estratégico de Desarrollo Nacional Concertado y validado por los actores donde se establezcan objetivos y metas posibles de cumplir?

Todo ha sido palabras y declaraciones políticas del ministro Carlos Oliva. El estimado de 4.2% del PBI para el 2019 del MEF, coincidía con la del BCR cuando se afirmaba que se iba a lograr un 4%, en base a la inversión pública, porque debemos conseguir su expansión en 17% para el año”.

Objetivos claros, pero sin explicar de qué forma. El 40% de las obras que el sector público tiene en ejecución se encuentran en proceso de arbitrajes, y paralizadas con juicios que se perderán, o se pagarán costos adicionales de obras a las empresas constructoras, incrementando sus costos.

El ministro Oliva hizo cometer un error, debemos suponer, al presidente cuando éste en su mensaje a la Nación, afirmó que la economía crecería en 3%.

Si el crecimiento de China se reduce del 8% al 6%, y caen los precios de los minerales, (cobre, oro, plata, plomo, molibdeno, zinc, estaño) que constituyen el 60% de nuestras exportaciones, nuestro PBI caerá invevitablemente.

Recordemos que Adam Smith señalaba que existen aspectos claves para generar riqueza: un esquema jurídico de justicia para todos (reforma integral del poder judicial para que sea eficaz y probo), libre comercio y competencia abierta (ver el comportamiento del oligopolio de las AFP´s que retiene como Fondo Administrado S/. 158,000 millones casi 22% del PBI nacional, y otros sectores). El Ministro de Economía avala que no se respete el artículo 58° de la Constitución Política del Perú.

Aplicamos una economía donde la iniciativa privada es libre. Bajo este régimen, el Estado orienta el desarrollo del país, y actúa en las áreas de promoción de empleo, salud, educación, seguridad, servicios públicos e infraestructura.

Falta elaborar el Plan Estratégico de Desarrollo Nacional validado por los actores, reformar el Estado (disminuir la burocracia nacional por una selección de directivos capaces) y restructurar el presupuesto de la república reduciendo, y de ser necesario hasta eliminando gastos innecesarios.

Como hemos afirmado, el Centro Nacional de Planeamiento Estratégico (CEPLAN) debe integrar las propuestas para elaborar el Plan Estratégico Nacional y los planes sectoriales, regionales, y el MEF no debe ser juez y parte.

Este Ministerio debe ser reestructurado, pasando el viceministerio de economía al de Producción; fortalecer el mercado interno (incremento del consumo e inversión), impulsar el sistema de programación multianual y gestión de inversiones, aumentar la inversión en investigación y tecnología, y mejorar la productividad laboral.

Somos 900,000 habitantes en extrema pobreza y 6 millones 593 mil en pobreza y la debilidad de nuestra economía es depender de recursos naturales.

Como decía el gran Óscar Wilde: "Aconsejar economía a los pobres es a la vez grotesco e insultante. Es como aconsejar que coma menos al que se está muriendo de hambre”.

El ministro de Economía, Carlos Oliva, ha sido incapaz de cumplir sus promesas, de sacar adelante un solo proyecto minero, -aunque en esto, por ejemplo, ha tenido el apoyo del Ministerio de Energía y Minas- de acelerar la reconstrucción del norte, de impulsar la ejecución del gasto público, de racionalizar el gasto en publicidad estatal, entre otros importantes aspectos.

Por estas razones, quien lidera el MEF debe anticiparse al mandatario y renunciar, y dejar este importante despacho en mejores manos, aunque claro, su presencia en la reunión política con el presidente del Congreso, Pedro Olaechea, no hace albergar muchas esperanzas.

*Germán Lench Cáceres


Economista