De los vladivideos a los CNMaudios
Como si fuera un juego perverso, rutinario e interminable nuestra política nos revela otro escándalo, esta vez en la judicatura. Algo que todos sabían o sospechaban, pero nadie conocía al detalle.
Los primeros días, los destapes fueron evidentes. Si embargo, con el pasar del tiempo vinieron las sospechas, las denuncias y ridículas excusas. Y también la difusión de material absolutamente inocuo desde cualquier punto de vista.
Este panorama hace sospechar que la primera parte de la exposición fue necesaria, hasta imperativa, pero la segunda sesgada, dirigida a atacar un sector en particular, como el de la señora Keiko Fujimori, quien no hace un deslinde claro sobre las menciones en el primer audio, amén de otros problemas sobre los cuales no ha sido clara ni firme.
En esta página no nos hemos unido al cargamontón sobre este grupo, ni al odio. Pero con la misma entereza estamos en condiciones de demandarle claridad para ejercer su liderazgo, si es quiere alcanzar algún día el poder.
Volviendo al Poder Judicial, el problema es que requiere una profunda reforma que este poder autónomo ni hace ni permite. El Consejo Nacional de la Magistratura, fue creada a instancias del toledismo, como un órgano representativo también de la sociedad civil (¿cuál es la otra?), y en el colmo del cinismo, es ahora criticada por quienes la promovieron.
Finalmente en la Fiscalía, sector clave en la investigación y sanción de los casos, parece haberse generado una lucha entre bandos. Los que apoyan a Pablo Sánchez (según nuestras fuentes, próximo a la progresía y a la izquierda), y los que están a favor de Pablo Chávarry, de quien dicen tiene proximidad al APRA y al fujimorismo. Las recientes medidas del novísimo y cuestionado fiscal han despertado interés, pero el país requiere que alguna vez sus instituciones funcionen, para poder retomar los principales problemas de nuestra agenda: reactivación económica e inseguridad ciudadana.
Para abordar estos problemas políticos judiciales, el presidente Vizcarra propuso un referéndum, quizá queriendo con ello revalidar un acuerdo de un congreso desprestigiado, tanto o más que hace 30 años, cuando estaba integrado por mejores representantes, pero tampoco pudo impedir la galopante crisis económica, el terrorismo, y la corrupción.
En “Detrás de la Cortina”, en reiterados editoriales, nos reafirmamos en advertir sobre el colapso final de nuestro sistema político. Han sido necesario audios para finalmente probar la existencia de un engranaje de corrupción que afecta gravemente a todo el sistema de justicia.
Especialistas como Víctor García Toma comentan que “…la estabilidad del sistema político peligra.” (Gestión, 20-7-2018, p. 2). Advertencia que ya antes la han mencionado historiadores como Nelson Manrique, o constitucionalistas como Javier Valle-Riestra.
Hay quienes piensan, como el periodista José María “Chema” Salcedo que, además estaríamos ante el fin del Estado unitario. Quizás eso explique que, en su mensaje del 28 de julio, el presidente Vizcarra enfatizara el compromiso de intensificar la descentralización del país.
Resulta patético que pasemos pues, de un escándalo a otro, sin terminar de aclarar uno para empezar con aún más patéticos controles de daños, y la mayoría de las veces manteniendo un status quo.
De los audios a los videos. ¿Y la agenda del país, empezando con la impostergable e imperativa reforma político - electoral, para cuándo? ¿Qué estamos esperando?