La oscilante trayectoria de Aerosmith
El grupo se formó cuando Steven Tallarico (Tyler) con su amigo Joe Perry también conocidos como los gemelos tóxicos- vaya apodo-, deciden formar un grupo de hard rock en Boston en 1970, no se consolidaría hasta 1975, con Toys in the Attic, en el cual apareció su primer gran éxito, Sweet emotion, y Rocks de 1976.
Para finales de la década de los 70, serían una de las bandas más populares de hard rock en todo el mundo. Sin embargo, la adicción a las drogas y los conflictos internos ocasionarían las salidas de Perry y Whitford.
El grupo se recuperó con el Permanent Vacation, que contiene Rag doll, una mezcla de rock y funky, la balada Angel, pero fue el Get a grip el que los envió a la cima, con temas como la sucia y pesada Love in the elevator, Janice got a gun, Monkey on my back (sobre las drogas, algo que conocían muy bien), y la romántica What it takes. Los tipos serán rudos, disolutos, pero no faltos de corazón. Traducidas al castellano, las letras de alguna de sus baladas pueden ser tan sentidas como las de cualquier bella y lacrimógena canción en nuestro idioma. En general, más allá de algún sonido lastimero, y una sentida letra de alguna de sus brillantes tonadas, tipo Angel, What it takes, o Hole in my soul, el sonido de la agfrupacón tiene fuertes raíces en el blues, mientras que a Steven Tyler, se le compara físicamente con Mick Jagger.
En Livin on the edge, destilan energía, Cryng, aflora despecho nuevamente, y Crazy, el video donde aparece el, Alicia Silverstone, y su hija, la actriz y modelo Lyv Tyler, producto de su relación con una actriz porno. Nine lives, su siguiente disco, contendría Pink y Hole in my soul, temas que van entre la rudeza y el romanticismo.
Después vendría Armaggedon, y otros títulos más. El grupo ha estado en Lima y ha hecho vibrar a los fans peruanos, en el 2011 y 2016. Aerosmith es una de las bandas con mayor número de ventas de todos los tiempos, con 200 millones de álbumes en todo el mundo. Los chicos malos de Boston siguen en vigencia, aunque sin la resonancia de sus años dorados.
Janice got a gun, por ejemplo, es una de las mejores canciones de la agrupación, con un tema muy sensible, recurrente en Estados Unidos y otros países, incluido el nuestro: la violencia familiar.
La tensa voz de Tyler, el sonido del percutor, el entresijo de guitarras, y todo el desarrollo del video, que por momentos más se asemeja a un capítulo de CSI que a un clip musical, transmite un dramatismo que nos exime de mayores comentarios.