< Detras de la cortina

¿Más leyes, más trabajo?

El Presidente insistió ayer en que el Premier irá al Congreso a pedir facultades y en que la aprobación de las mismas permitirá continuar con el trabajo del Gobierno, evitando que el país se pare.

He opinado por qué este argumento es errado y falaz conceptual y objetivamente (ya se han otorgado facultades y en los tres rubros requeridos los resultados son, si existen, mediocres).

Extenderé mi opinión, fundada esta vez en una reciente experiencia personal. Este último fin de semana viajé junto a familiares y amigos a la bellísima y cada vez más próspera Urubamba. La paz que se respira en ese valle incomparable es acompañada por una afluencia cada vez mayor de turistas locales y extranjeros, la vialidad y el orden han mejorado, su gastronomía está mejor que nunca y las palabras progreso y futuro suenan cada vez menos extrañas.

Pero, siempre hay un pero, este deslumbrado turista/columnista sufrió un accidente tras una aparatosa caída de un bello pero nervioso y desconfiado caballo de paso (afición que guardo desde niño). El incidente ocurrió el viernes 1 de mayo. ¿Sabe usted, amigo lector, cuándo pude descartar científicamente (felizmente solo terminé policontuso) si había sufrido o no una fractura o fisura en costillas y cadera? Pues el domingo por la tarde/noche, recién llegado a Lima.

¿La razón? Ningún (así como lo lee), ningún establecimiento de salud (público o privado) atendía siquiera emergencias el 1 de mayo. Y lo peor, existiendo dos hospitales de Nivel 1 del Minsa y EsSalud (que según me explican permitirían atender problemas de mediana a alta complejidad, inaugurados con bombos y platillos no sé ni me interesa por cuál gobierno), ninguno cuenta con servicio de imágenes, es decir, rayos X, y menos tomógrafos y demás.

Es decir, un turista o un urubambino que tuviera la suerte de accidentarse un día laborable, tiene que viajar hora y media hasta el Cusco para contar con el servicio de rayos X u otro examen similar. Y todo esto en medio de un extraordinario boom de inversión privada en infraestructura turística y del ambiente positivo que he descrito.

¿Quiénes hacen su trabajo y quiénes no? ¿El Presidente y el ministro de Salud necesitan más normas para que los dos hospitales públicos de Urubamba brinden el servicio de imágenes? ¿Tenemos que facultar al Ejecutivo para que haga su chamba?

*Abogado, periodista, analista político

Diario “Correo”, 5/6/15

Reproducido con la autorización del autor