Velasco y el militarismo peruano
Ahora que se habla de una "Segunda reforma Agraria", recordamos este interesante artículo sobre su mentor, Juan Velasco Alvarado, y quien es, al parecer, el más liberal referente de Pedro Castillo.
Velasco no ha muerto. La conmemoración de su golpe el día de ayer despertó a varios en redes sociales y creo que, dada la coyuntura, valía la pena levantarlo un rato de su cómodo (o incómodo) lugar en el más allá. Así, aparecieron los que no le perdonan ni la vida ni la muerte, y los que alaban el hecho de que le diese la estocada final al supuesto status quo “plutocrático y aristócrata” del Perú de los cincuenta.
Los números no mienten. Los efectos de sus reformas en la economía fueron dramáticos (nota mental: cuando hablo de “economía”, hablo de pobreza o riqueza, trabajo o desempleo, calidad de vida o vulnerabilidad. Entonces, cuando vean a algún analista decir “no todo es economía, dejen de preocuparse por la economía”, sean críticos). Velasco empobreció a millones de peruanos.
Sin embargo, recordarlo para criticar o alabar aburre. El socialismo de los setenta no volverá. Hoy enfrentamos un socialismo populista o un populismo socialista diferente. Pensemos más bien en qué luces nos puede dar este “chino” sobre nuestra coyuntura.
En una encuesta sobre “El Poder en el Perú” de "Semana Económica", el presidente del Consejo de ministros, el general en retiro Walter Martos, aparece como el segundo personaje más poderoso del país, detrás de Vizcarra.
Y el dato no viene solo. Según la misma encuesta, la aprobación de su gestión es superior a la del presidente. Martos es uno de los pocos que aprueba el examen, superado solo por dos mujeres, Toni Alva y Pilar Mazzetti. Lo interesante es que mientras ellas tienen un rol sensible, concreto y medible, a Martos no se le puede atribuir nada mas que su liderazgo político simple y pétreo.
Y es que Martos demuestra algo más. Mientras innumerables políticos y técnicos (lamentablemente de quinto o sexto recambio) no pudieron generar solidez alrededor de la figura presidencial (¿quién podría ser sólido al lado de esta figura presidencial?), el general sí.
Pero la encuesta sigue confirmando mi intuición de que los peruanos somos aún militaristas. Mas de lo que afirmamos en público. A la pregunta ¿quiénes son los que más influyen en el presidente? La respuesta es Martos. Y a la pregunta ¿a quién debería escuchar el presidente? Los resultados ponen a Martos tercero, detrás de Toni Alva y Julio Velarde, actores ineludibles en tiempos en que intereses, deudas y reprogramaciones ocupan el debate. Martos siempre está en la foto.
¿Alguien lo conocía antes de la pandemia? En el Ejército y el sector público sí, pero no era un personaje mediático. ¿Qué o quién le ha dado entonces esta legitimidad automática y consistente, en solo algunas semanas? Definitivamente su trayectoria, bastante limpia al parecer, pero sobretodo su ser y proceder militar.
Aislando el componente imaginario que nos trae esta figura asociada a seguridad en tiempos de crisis, creo que el fenómeno “Martos” es el reflejo de unas Fuerzas Armadas que pueden redefinir su futuro, y me gustaría que lo hicieran de manera profunda pero en la dirección correcta. Esto es vital. En la dirección correcta.
El “chino” Velasco era parte de una promoción de altos mandos formada en el CAEM por los más ilustres académicos socialistas de las Universidades San Marcos y Católica. Su golpe no fue un hecho casual, fue la respuesta cruda y radical al comportamiento estático de la élite peruana, pero también el resultado de un plan bastante bien calculado por un grupo de ideólogos anti-empresa que venía moldeando y trabajando sus conciencias para que se sientan capaces de ser militares, gobernantes y hasta gerentes, pero todo a la vez.
Y esto no puede volver a ocurrir. Yo sé que andamos preocupados por Antauros, Urrestis y Lunas, pero nunca hay que descuidar a nuestras Fuerzas Armadas. ¿Cuál será su rol en el futuro? ¿Qué ideología o ideólogos nutren a sus nuevas promociones? ¿Qué Historia o Modelo de desarrollo les enseñamos en Chorrillos, Surco o el Callao? Abundante lana para otra prenda.
Publicado en https://gestion.pe/blog el 4/10/2020